Desde pequeñas, muchas mujeres escuchan frases como “es normal que duela”, “aguanta, es parte de ser mujer” o “con un té se te pasa”. Y así, aprendemos a convivir con el dolor, a esconderlo tras una sonrisa y a seguir como si nada, incluso cuando algo dentro de nosotras grita que no está bien.
El problema no es sólo el dolor… el problema es que lo hemos aprendido a ignorar.
Y cuando lo común se vuelve costumbre, dejamos de preguntar: ¿Esto debería doler así?
Porque a veces, no se trata sólo de un “cólico menstrual”, sino de una señal urgente que merece ser atendida.
¿Realmente es normal ese dolor?
Cada cuerpo es distinto, eso es cierto. Pero hay algo que no debemos pasar por alto: El dolor intenso, incapacitante o que interfiere con tu vida diaria no debería ser parte natural de tu menstruación. Sentir que no puedes levantarte, que los analgésicos no son suficientes o que cada mes se convierte en una batalla, no es algo que debamos aceptar como rutina.
Ese malestar que aprendiste a sobrellevar podría estar siendo causado por condiciones más complejas que muchas veces se disfrazan de “dolores menstruales”.
Historias invisibles detrás de un dolor visible.
Hay mujeres que han pasado años buscando respuestas. Mujeres que han sido llamadas exageradas, dramáticas o hipersensibles, cuando en realidad estaban lidiando con diagnósticos como:
- Endometriosis: Una enfermedad donde tejido similar al del revestimiento del útero crece en lugares donde no debería. El dolor es profundo, punzante y puede aparecer incluso fuera del periodo menstrual.
- Adenomiosis: Ocurre cuando ese mismo tejido se incrusta en el músculo del útero, provocando menstruaciones muy dolorosas y pesadas.
- Miomas uterinos: Que pueden presionar órganos, generar incomodidad constante y hacer del ciclo menstrual un verdadero martirio.
- Síndrome de ovario poliquístico: Que además de alterar las hormonas, también puede traer consigo dolor pélvico y ciclos irregulares.
- Enfermedades inflamatorias o infecciones pélvicas: Que requieren atención médica urgente pero que muchas veces se enmascaran tras la idea de “un cólico fuerte”.
Estas condiciones no sólo afectan el cuerpo. Afectan el ánimo, la autoestima, las relaciones, el trabajo y la calidad de vida en general. Y lo más doloroso de todo es que muchas veces el diagnóstico llega demasiado tarde… porque nadie nos enseñó a poner atención.
No es debilidad, es conciencia.
Romper con la costumbre de aguantarse no es sencillo. Durante años se ha glorificado la idea de que una mujer fuerte es aquella que sigue adelante sin quejarse. Pero hoy, queremos decirte algo distinto: Escucharte también es fortaleza. Reconocer el dolor, pedir ayuda y buscar respuestas también es amor propio.
Si tu menstruación te duele al punto de impedirte vivir con normalidad, eso no es normal. Es señal de que algo puede estar pasando dentro de ti y merece ser investigado.
En MedicallHome, no estás sola.
Si en este momento estás lidiando con cólicos intensos, dolores que no sabes cómo explicar o malestares que se repiten mes a mes, no estás sola ni tienes que aguantar en silencio. En MedicallHome, nuestros médicos están para ayudarte, escucharte con respeto y encontrar el origen real de ese dolor que has cargado por tanto tiempo.
La salud femenina merece espacio, atención y cuidado. Y tú mereces vivir tus ciclos con bienestar y dignidad.
Déjanos cuidarte: https://medicallhome.mx/individuales/